NOTA DE PRENSA (26-11-2019) PLATAFORMA “TOLEDO, SOCIEDAD, PATRIMONO Y CULTURA” Y JORNADAS VEGA BAJA


Desde la Plataforma “Toledo, Sociedad, Patrimonio y Cultura” expresamos nuestra satisfacción por la celebración de las recientes Jornadas sobre Vega Baja en el campus de la Fábrica de Armas de la UCLM con la participación de entidades y organizaciones que coinciden en general con nuestros planteamientos, materializados en la denuncia por expoliación de patrimonio ante el Ministerio de Cultura del 2 de febrero de 2019 por los hechos que se venían produciendo en la Vega Baja y La Peraleda, que pocos veían entonces o apenas trascendían a la opinión pública, y ahora, por fin, parece que todos vemos.

Nos causa satisfacción la enérgica defensa de los valores patrimoniales y paisajísticos de Gregorio Marañón en dichas Jornadas, después de la inquietud creada cuando, tras una reunión de la Real Fundación con la alcaldesa el 6 de julio de 2018, la prensa registraba las siguientes palabras: “en los 30 años de historia de la entidad nunca hemos estado tan cerca del Ayuntamiento en lo que es la planificación urbanística de la ciudad”, al tiempo que la alcaldesa declaraba que “es una oportunidad para abordar una solución definitiva para la Vega Baja que lleva once años bloqueada” y “no habrá 1.300 viviendas en Vega Baja”. Seguramente se ocultó a la Real Fundación que esas viviendas eran las que apenas 20 días antes, el 28 de junio,  había aprobado la alcaldesa, con la Modificación 28 del PGMOUT 1986,  sobre el BIC Vega Baja, que con las 300 de la UA Circo Romano y las 98 del Cristo de la Vega, sumaban 1.698, sin contar con los usos dotacionales y terciarios para el resto de espacios. Sin embargo, eran, y son, viviendas y edificios de difícil edificabilidad sin incurrir en expolio de patrimonio. Por aquel entonces, además, también se había iniciado la construcción de los bloques de la ampliación Santa Teresa, lo que suponía un grave atentado al patrimonio y al paisaje, sin apenas manifestaciones en contra.

Aplaudimos también la propuesta de zonas verdes en Vega Baja, puesto que forman parte de recomendaciones de naturalización defendidas por amigos y miembros de nuestra plataforma, en publicaciones, encuentros y conferencias, entre ellas en la Biblioteca Regional de Castilla la Mancha, en los ciclos: El Toledo que tenemos, el Toledo que soñamos, en 2013, y Toledo en Cien años, en 2015, impulsadas por su exdirector, lamentablemente fallecido, Juan Sánchez, uno de los promotores de TSPyC. Todas aquellas conferencias están publicadas y a disposición de cualquiera. Así mismo, coincidimos con la Jornadas en el interés por Madrid-Río como modelo de naturalización de un entorno urbano, en aquel caso, impulsado por el alcalde Alberto Ruiz Gallardón y con múltiples premios, entre ellos de Hispania Nostra.  Es un ejemplo al que siempre recurrimos, pero no el único, considerando a la vez otros para mostrar variedad de formas de naturalización para la Vega Baja y la Peraleda, que, por cierto, también defendemos como una sola unidad geográfica e histórica, como no podría ser de otro modo. Por eso, la denuncia por expoliación de patrimonio ante el Ministerio incluye la anulación de la Modificación 29 del PGMOU de 1986 en La Peraleda, más de 5.000 viviendas en zona arqueológica, de protección de paisaje y valor medioambiental.

En cambio, no compartimos la construcción de la Senda Peatonal desde Santa Teresa, realizada en colaboración con el Ayuntamiento, la RFT, las RABCHT y la Escuela de Arquitectura de la UCLM, y que, según la alcaldesa en su presentación, el 7 de mayo de 2019, debería haber estado terminada el pasado agosto. Su trazado entierra innecesariamente restos arqueológicos y dificultan la comprensión. La sorpresa inicial se ha visto aumentada al comprobar la interrupción de la senda por la verja de protección preexistente, cuya retirada no ha sido aún autorizada, y al parecer, por la exigencia de patrimonio de que se cierre todo el perímetro de la senda,  que no había sido considerada antes, y finalmente por el anuncio de que la senda no se va a terminar, al interferir en otros proyectos. Todo ello da muestra de la improvisación y falta de sentido,  con que se ha erigido. En esas circunstancias, cuesta todavía más comprender un proyecto para el que el Ayuntamiento aprobó una inversión de 352.122,78 euros, cuya intención parece ser mostrar que se puede hacer algo en la Vega, lo que ha abierto el camino al anuncio de otras actuaciones no deseadas. El reciente Informe de ICOMOS, solicitado también por TSPyC, destaca el carácter innecesario de la obra. Coincidimos desde luego con criterios de naturalización de la zona, pero no puntual y menos sin un Plan previo de Protección del Yacimiento y del Paisaje,  en un yacimiento que todavía esté por excavar,  y por lo tanto sin conocer la realidad arqueológica,  y sin saber cuáles son los terrenos más apropiados para naturalizar sin dañar u ocultar restos del pasado, como hace la Senda Peatonal.

Por otro lado, consideramos prioritaria precisar la fórmula legal para avanzar en la ordenación y protección de Vega Baja y La Peraleda, superando propuestas indefinidas de un Plan Especial, sin concreción de objetivos y que no especifica legislación a seguir, si la de patrimonio o la del suelo y el territorio, pues serían distintos los resultados. Tampoco nos infunde seguridad la frase: “terminar la fachada de Vega Baja”, que llega de manera reiterada desde la Escuela de Arquitectura, que para muchos carece de sentido, y que huele a otro bocado más al yacimiento,  y aun produce más inquietud la expresión que hemos escuchado alguna vez de: “mantenimiento de aprovechamientos para generar plusvalías económicas, que hagan posible su gestión y desarrollo sostenible”. Por eso, creemos que sería recomendable, antes de nada, ampliar la calificación de Centro Histórico a las dos Vegas, la Alta y la Baja, ya que la ciudad carece de sentido sin estas,  como se ha hecho en otras ciudades y ha propuesto el profesor Zárate (La Tribuna, 16/11/19, y La Cerca, 18/11/19), de acuerdo con la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985, la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla-La Mancha de 2013 y la TRLOTAU de 2010. Sólo entonces sería el momento de un Plan Especial de Protección, dentro de la legislación de Patrimonio que permita tratar en conjunto todo ese espacio, cumpliendo con la declaración de Toledo como Conjunto Histórico Artístico en 1940, las Instrucciones de Bellas Artes de 1968, el Plan Especial del Centro Histórico de 1997 y las calificaciones como Ciudad Patrimonio de la Humanidad en 1986 y Ciudad de Valor Universal Excepcional de 2013. Todas esas son normas que la administración lleva años incumpliendo, las últimas veces con la ampliación de Santa Teresa, con el  Plan Especial de Reforma Interior de Desarrollo UA-34 del POM de 2007, y con las modificaciones 28 y 29 del PGMOU.

En cualquier caso, considerando el éxito de las Jornadas y lo manifestado por las personas e instituciones que han intervenido, como la RFT, la RABACHT y la UCLM, estamos seguros, y esperamos,  que ahora pedirán también la anulación de las modificaciones 28 y 29 del PGMOU. Todos somos conscientes de que, en un Estado de derecho, las decisiones se toman por imperativo legal y no en base a declaraciones y noticias más o menos fundamentadas, como la reciente del Cuartel de la Guardia Civil y ahora 120 viviendas en suelo dotacional. En esta situación de incertidumbre, no dudamos de las palabras de la alcaldesa de no construir 1.300 viviendas dentro de un BIC, pero quedan 398 (si no contamos esas 120 que, según la prensa,  parece tener intención de aprobar el concejal Sabrido en suelo dotacional) y más de 5.000 en La Peraleda según el planeamiento oficial. La solución ha de ser jurídica, y es muy sencilla: anular o cambiar las Modificaciones 28 y 29 por parte del Ayuntamiento y, a continuación, por la JCCLM. Así, las administraciones, local y regional, responderían a los requerimientos ministeriales para dar explicaciones por la denuncia de expoliación del patrimonio de Toledo y proporcionarían a la vez seguridad legal.

Los participantes en las Jornadas se han manifestado unánimemente contra la construcción de viviendas y en favor del patrimonio arqueológico y el paisaje. No dudamos, por supuesto, de que todos son también conscientes de lo dicho: las normas sólo se cambian por procedimientos legales, utilizando la vía administrativa, como ha hecho TSPyC, no mediante declaraciones a la prensa. Sería, por lo tanto, importante que la RF y la RABACHT hicieran ahora lo mismo: exigir la retirada de las Modificaciones 28 y 29 en la Vega Baja y La Peraleda, con la fortuna de contar con Gregorio Marañón como persona de reconocido prestigio para impulsar esa petición y con canales de comunicación fluidos con el Ayuntamiento y la JCCLM. Así se garantizaría la no construcción de viviendas en esas zonas, la conservación de vestigios arqueológicos, la puesta en valor de los monumentos y la naturalización de todo ese territorio, incluida su identificación con el río Tajo.


Fragmento de Vista Sur de Toledo de Toledo desde los Cigarrales, Aureliano de Beruete, 1895.
Cuadro del desaparecido Museo de Arte Contemporáneo de Toledo  



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