Entrevista: Los profesores Antonio Zárate y Fernándo Martínez Gil entrevistados en la Ser

 Esta mañana, dos representantes de la plataforma "Toledo. Sociedad, patrimonio y cultura", los profesores Fernando Martínez Gil y Antonio Zárate, han sido invitados a una entrevista en la Cadena Ser de Toledo, con motivo de la reciente presentación pública de esta propuesta.

Poco a poco, los dos, con sus voces serenas, y sabias, han ido desgranando todos y cada uno de los temas, tomando las riendas de la entrevista, y dándonos un adelanto del trabajo que la plataforma va a realizar de aquí en adelante.

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Y viene al caso hablar de reciente, puesto que en realidad, como bien ha explicado A. Zárate, esta plataforma ya tiene un largo recorrido, y muchos de sus integrantes ya estaban presentes en el año 2006, cuando una conjunción de propósitos entre organismos nacionales e internacionales, instituciones, organizaciones sociales, movimientos ciudadanos y personas individuales, consiguieron que la administración diera marcha atrás con su proyecto de urbanizar Vega Baja.

Desde entonces, e incluso en algunos casos, desde años antes, algunos de los componentes de esta nueva plataforma ya organizaron charlas, reuniones, o publicaron artículos y libros, poniendo en evidencia los problemas de la ciudad, que en esencia son los mismos de entonces pero agravados. Ahora la situación es más grave, debido a la falta de sensibilidad hacia la conservación del patrimonio, de los valores paisajísticos y medioambientales de Vega Baja, La Peraleda, Safont. o la Huerta del Rey, entre otros, de las administraciones, que vuelven, años después, a poner a disposición del ladrillo estos espacios, curiosamente cuando existe una legislación de protección y más se habla institucionalmente de la necesidad de preservar.

Peraleda
Se ha hablado de la despoblación residencial del casco histórico y su transformación en usos turísticos, que hacen cada vez más difícil la vida, a los cada vez menos habitantes. Se ha producido un vaciado de funciones, promovido por la propia administración, y un ejemplo es cómo han sacado del casco prácticamente toda la administración, dejando un importante número de edificios vacíos, o perdido la oportunidad de que muchas de las personas que llegan de fuera a trabajar para la administración residieran en el casco. Son cosas que se decían ya en 1984, cuando se publicó un libro sobre el casco histórico de Toledo, donde ya se señalaba lo que podía ocurrir, o el congreso, también de los años 80, "Toledo, ciudad viva, ciudad muerta", y más de 30 años después seguimos en lo mismo. Nadie duda de la consideración del turismo como generador de riqueza y empleo, pero sí que es necesario cambiar el modelo turístico, que es el de siempre,  heredado de los años 20, diversificando la oferta, ampliando los itinerarios, que no se limiten a las mismas rutas, con los turistas cautivos llevados siempre a los mismos sitios, incluyendo por ejemplo el recurso del paisaje, infravalorado, como otro valor más.

Igualmente está infrautilizada la dimensión cultural, que puede ser rentable. No todo debe basarse en la especulación inmobiliaria, en que vengan cada vez más y más turistas. La ciudad debería encaminarse a una diversificación de recursos en cuanto a la generación de riqueza, no puede basarse todo en hacer de Toledo un producto turístico que nos convierte en una especie de parque temático. Eso es una barbaridad. 

Todos esos problemas se encuentran agravados por la falta de un proyecto o plan de ciudad, que provoca que lo que se hace, siempre obedece a las ocurrencias. Un plan que debería ser consensuado y debatido entre todos, es decir, de consenso, y de participación, pero que cuando los políticos han tenido la oportunidad de coger el guante y liderarlo, lo único que han hecho, como mucho, es hacerse una fotografía, sean del partido que sean, y luego, han desaparecido. Así, por ejemplo, en los varios encuentros públicos, que se han organizado para debatir estos asuntos, sorprendentemente, las distintas corporaciones municipales, ni siquiera han tenido la deferencia de mandar a un representante a dialogar, hablar y debatir, mientras que día a día acuden a actos totalmente banales, porque esos sí parece que les dan votos.

La Voz del Tajo. 8 de marzo de 1978
Por último no se ha podido pasar por alto el problema del río Tajo, donde ha existido y existe, una falta de voluntad política para solucionar la situación (que lleva enquistada más de 40 años), y sólo se han colocado en la foto cuando se ha realizado alguna manifestación, o intentando eclipsar a la plataforma implicadas en la defensa del río, llorando lágrimas de cocodrilo. Aunque, evidentemente, no depende sólo de nosotros, las autoridades locales deberían presionar y hacer fuerza con firmeza ante instituciones superiores, ponerse de acuerdo con otras comunidades, y tener una conciencia  ecológica que no existe. El Tajo es algo más que rentabilizar el río para aprovechar los recursos en Castilla-La Mancha, que está muy bien, pero el río es un ecosistema del que dependemos todos, y su degradación afecta claramente a la degradación de nuestro nivel de vida. El río, que ha formado parte de la identidad de la ciudad y los toledanos, ahora está ahí, lejano, como un trastero. Sólo tenemos que ver cómo la Confederación Hidrográfica del Tajo, a la que tanto hay que reclamar, nos saca los colores poniéndonos multas por realizar vertidos al río.

Estas palabras eruditas abren la marcha de lo que esperamos sea una actividad de la plataforma basada en la honestidad, independencia y trabajo, para reivindicar y exigir a nuestras autoridades que mejoren nuestro entorno y por lo tanto la calidad de vida de todos, a través de la conservación del patrimonio, de los paisajes culturales y naturales, y del medioambiente. Al mismo tiempo nos comprometemos a difundir estos valores entre la ciudadanía, con la conciencia de que sólo se valora aquello que se conoce.